Con la clara exigencia a los países desarrollados de cumplir sus compromisos medioambientales y ecológicos, contenidos en la “Declaración de Quito”, culminó la reunión de Ministros de América Latina y el Caribe, de cara a la cum bre de Rio de Janeiro.
El informe final fue firmado por los representantes de 32 países de la zona, luego de intensos debates para lograr una posición concensuada hacia la Conferencia de la ONU sobre “Desarrollo Sustentable” prevista para Junio próximo en Brasil.
Se tomó el desafío de adoptar políticas comunes y encontrar soluciones a los problemas ecológicos de la región, tras la finalizaciòn de la reunión el pasado 4 de febrero.
Las discusiones giraron en torno a la necesidad de adoptar políticas mediambientales colectivas para detener el cambio climático, la inequidad del desarrollo entre países y dentro de éstos, pero a partir de una agenda medioambiental conjunta.
Los delegados coincidieron en la necesidad de estrablecer estratégias comunes para la conviviencia en armonía con la naturaleza y la protección ante los impactos causados por las catástrofes naturales, y en particular por el accionar depredador de los seres humanos.
El foro Ministerial promovió el reconocimiento de los derechos que tiene la naturaleza, los derechos humanos, la solidaridad intergeneracional, y la inclusión económica y social, respetandola diversidad cultural y social, de las comunidades, pueblos y también nacionalidades.
También se reconoció la necesidad urgente de aprobar los proyectos medioambientales y reducir al minimo la contaminación de nuestro planeta.
Algunas delegaciones cuestionaron que en el mundo no se ha constituído, o propuesto, un Tribunal Internacional de Justicia Ambiental, para velar
por el cuidado del planeta, ante la indiferencia de las grandes potencias mundiales.
En la extensa declaración final destaca:
“Los Ministros de Medio Ambiente de América Latina y el Caribe como mecanismo de consultas políticas deberá ser fortalecido para que la región pueda construir una visión de integraciòn para el desarrollo sostenible.”
“Reconocimiento al derecho de las poblaciones para superar la pobreza, la eliminación de las condiciones que generan la inequidad, y exclusión, el ejercicio de derechos en armonía con la naturaleza, respetando la madre tierra, y los derechos de los pueblos indígenas y comunidades locales, bajo los principios de la Agenda 21, para actividades en pro del desarrollo sustentable”.
“Instar el cumplimiento del compromiso historico de los paises desarrollados a destinar el 0.7% del PBI, a la asistencia oficial al desarrollo”.
Mas adelante se es claro en el mensaje al afirmar: “Instamos a los paises desarrollados a cumplir con los compromisos de mitigación en el marco del Protocolo de Kyoto, y a definir y cumplir metas más ambiciosas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, períodos de compromisos claros, bajo mecanismos de exigibilidad acordado”.
“El desarrollo sostenible se alcanzará con respeto de los límites biofísicos y los cliclos vitales de la naturaleza, la erradicación de la pobreza, la disminución de la brecha entre ricos y pobres, asegurando la inclusión social como objetivo indispensable para la consecución del desarrollo sostenible en el marco de un órden económico, más solidario e inclusivo”.
La declaración también es clara en cuanto a la ONU y Rio + 20: “Que se aliente a la Conferencia de la ONU sobre Desarrollo Sostenible (Rio-Brasil)
para que considere, en el constexto de la seguridad alimentaria y desarrollo agrícola, la excesiva volatilidad de los precios de los alimentos y la especulación de los mercados de productos básicos, como un tema y un factor que compromete el logro del objetivo de erradicar la pobreza en los países en vias de desarrollo”
“Que uno de los primeros objetivos de la Conferencia de Rio + 20, es acordar una visión y compromiso renovados con el desarrollo sostenible para erradicación de la pobreza, la promosión de la inclusion y equidad social, por lo tanto, esa será una oportunidad indiscutible para orientar nuestros esfuerzos en la construcción de un nuevo orden económico Internacional más justo, equitativo, e incluso que supere el desgaste, descredito y limitaciones del modelo de desarrollo vigente”.
Una de las ideas más firmes en el Foro Ministerial de Medio Ambiente, fue la urgencia en el reconocimiento del derecho a la vida en armonía con la naturaleza y emprender proyectos restauradores del espacio vital que es la Madre Tierra.
El Director del Programa de la ONU, para el Medio Ambiente, Achira Steiner, reconoció ante la prensa en Quito, los avances ambientales en varios países de la región, pero que áún persisten problemas de importancia.
Agregó que como en otras regiones del mundo, “sabemos que los éxitos están siendo opacados por la velocidad de los cambios ambientales que están amenazando los sistemas de soporte de vida que mantienen el progreso y la prosperidad”.
El cambio climático y la destrucción de la biodiversidad son los principales peligros que amenazan a la humanidad, junto a la posibilidad de una guerra nuclear.
Los Ministros de Medio Ambiente de Latinoamérica y el Caribe reclamarán en Rio + 20, el cumplimiento de compromisos ambientales y la acción conjunta para salvaguardar el Planeta.
La esperanza es que se cumpla.
Manuel Méndez
Periodista Greenaccord
Montevideo – UruguayCon la clara exigencia a los países desarrollados de cumplir sus compromisos medioambientales y ecológicos, contenidos en la “Declaración de Quito”, culminó la reunión de Ministros de América Latina y el Caribe, de cara a la cum bre de Rio de Janeiro.
El informe final fue firmado por los representantes de 32 países de la zona, luego de intensos debates para lograr una posición concensuada hacia la Conferencia de la ONU sobre “Desarrollo Sustentable” prevista para Junio próximo en Brasil.
Se tomó el desafío de adoptar políticas comunes y encontrar soluciones a los problemas ecológicos de la región, tras la finalizaciòn de la reunión el pasado 4 de febrero.
Las discusiones giraron en torno a la necesidad de adoptar políticas mediambientales colectivas para detener el cambio climático, la inequidad del desarrollo entre países y dentro de éstos, pero a partir de una agenda medioambiental conjunta.
Los delegados coincidieron en la necesidad de estrablecer estratégias comunes para la conviviencia en armonía con la naturaleza y la protección ante los impactos causados por las catástrofes naturales, y en particular por el accionar depredador de los seres humanos.
El foro Ministerial promovió el reconocimiento de los derechos que tiene la naturaleza, los derechos humanos, la solidaridad intergeneracional, y la inclusión económica y social, respetandola diversidad cultural y social, de las comunidades, pueblos y también nacionalidades.
También se reconoció la necesidad urgente de aprobar los proyectos medioambientales y reducir al minimo la contaminación de nuestro planeta.
Algunas delegaciones cuestionaron que en el mundo no se ha constituído, o propuesto, un Tribunal Internacional de Justicia Ambiental, para velar
por el cuidado del planeta, ante la indiferencia de las grandes potencias mundiales.
En la extensa declaración final destaca:
“Los Ministros de Medio Ambiente de América Latina y el Caribe como mecanismo de consultas políticas deberá ser fortalecido para que la región pueda construir una visión de integraciòn para el desarrollo sostenible.”
“Reconocimiento al derecho de las poblaciones para superar la pobreza, la eliminación de las condiciones que generan la inequidad, y exclusión, el ejercicio de derechos en armonía con la naturaleza, respetando la madre tierra, y los derechos de los pueblos indígenas y comunidades locales, bajo los principios de la Agenda 21, para actividades en pro del desarrollo sustentable”.
“Instar el cumplimiento del compromiso historico de los paises desarrollados a destinar el 0.7% del PBI, a la asistencia oficial al desarrollo”.
Mas adelante se es claro en el mensaje al afirmar: “Instamos a los paises desarrollados a cumplir con los compromisos de mitigación en el marco del Protocolo de Kyoto, y a definir y cumplir metas más ambiciosas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, períodos de compromisos claros, bajo mecanismos de exigibilidad acordado”.
“El desarrollo sostenible se alcanzará con respeto de los límites biofísicos y los cliclos vitales de la naturaleza, la erradicación de la pobreza, la disminución de la brecha entre ricos y pobres, asegurando la inclusión social como objetivo indispensable para la consecución del desarrollo sostenible en el marco de un órden económico, más solidario e inclusivo”.
La declaración también es clara en cuanto a la ONU y Rio + 20: “Que se aliente a la Conferencia de la ONU sobre Desarrollo Sostenible (Rio-Brasil)
para que considere, en el constexto de la seguridad alimentaria y desarrollo agrícola, la excesiva volatilidad de los precios de los alimentos y la especulación de los mercados de productos básicos, como un tema y un factor que compromete el logro del objetivo de erradicar la pobreza en los países en vias de desarrollo”
“Que uno de los primeros objetivos de la Conferencia de Rio + 20, es acordar una visión y compromiso renovados con el desarrollo sostenible para erradicación de la pobreza, la promosión de la inclusion y equidad social, por lo tanto, esa será una oportunidad indiscutible para orientar nuestros esfuerzos en la construcción de un nuevo orden económico Internacional más justo, equitativo, e incluso que supere el desgaste, descredito y limitaciones del modelo de desarrollo vigente”.
Una de las ideas más firmes en el Foro Ministerial de Medio Ambiente, fue la urgencia en el reconocimiento del derecho a la vida en armonía con la naturaleza y emprender proyectos restauradores del espacio vital que es la Madre Tierra.
El Director del Programa de la ONU, para el Medio Ambiente, Achira Steiner, reconoció ante la prensa en Quito, los avances ambientales en varios países de la región, pero que áún persisten problemas de importancia.
Agregó que como en otras regiones del mundo, “sabemos que los éxitos están siendo opacados por la velocidad de los cambios ambientales que están amenazando los sistemas de soporte de vida que mantienen el progreso y la prosperidad”.
El cambio climático y la destrucción de la biodiversidad son los principales peligros que amenazan a la humanidad, junto a la posibilidad de una guerra nuclear.
Los Ministros de Medio Ambiente de Latinoamérica y el Caribe reclamarán en Rio + 20, el cumplimiento de compromisos ambientales y la acción conjunta para salvaguardar el Planeta.
La esperanza es que se cumpla.
Manuel Méndez
Periodista Greenaccord
Montevideo – Uruguay